Otra ausencia

Tomado de: http://iblnews.com

Todavía no hace un año que sufrimos la muerte de Laura —en octubre—, y en enero la de Wilmar, cuando el duelo arropa nuevamente los sentimientos y ánimos de la sociedad civil alternativa en Cuba. Oswaldo Payá, el más prominente de los líderes opositores dentro de Cuba, se ausenta físicamente del atlas de la oposición pacífica cubana.

Luchó promovido por su fe católica, compromiso y amor hacia Cuba para ganar relevancia con propuestas ignoradas en el radar de las autoridades, que solo legitiman y reconocen los derechos y la participación de sus seguidores en la vida política nacional. Pero los sueños de libertad que fomentó con su trabajo incansable por las libertades, derechos humanos y cívicos de los cubanos, continuarán vigentes en el futuro de la nación.

Recuerdo cuando entre los años 1988 y 1990 se inquietaba porque parecía que no escuchaban ni valoraban un discurso emitido desde la autenticidad política, y eso dejaba a los integrantes del Movimiento Cristiano Liberación, sin el necesario reconocimiento internacional y a merced de las arbitrariedades de las autoridades cubanas. Su brega constante fructificó escarbando las inconsistencias dictatoriales de la propia carta magna cubana. El Proyecto Varela y el programa Todos Cubanos, se erigen y fusionan con la historia de nuestra patria. Los sepultureros de los derechos y libertades de Cuba no podrán enterrar el ejemplo de Oswaldo ni esconder sus tropelías totalitarias de odio y discriminación. Que en paz descanse nuestro ejemplar compatriota.